Después del fiasco de Eurovegas, las autoridades locales están ansiosas por aflorar nuevos proyectos que les permitan dinamizar el sector inmobiliario como motor económico.
Sólo esta urgencia electoral puede explicar el deseo por colocar el Edificio España, igual que el ayuntamiento de Madrid accedió a transigir con las exigencias urbanísticas planteadas por el empresario Juan Miguel Villar Mir para transformar el complejo histórico de Canalejas.
España lleva meses de moda. Somos el destino favorito para los inversores en búsqueda de oportunidades. Entre los locales, sólo gigantes como Amancio Ortega se han atrevido a comprar ladrillo en plena crisis (Torre Picasso), aunque poco a poco otros millonarios como Juan Abelló o Mario Losantos parecen dispuestos a invertir de vuelta en España.